26.8.10

HoMbReS LoBo


El hombre lobo, también conocido como licántropo, es una criatura legendaria presente en muchas culturasindependientes a lo largo del mundo. Se ha dicho que este es el más universal de todos los mitos (probablemente junto con el del vampiro), y aún hoy, mucha gente cree en la existencia de los hombres lobo o de otras clases de «hombres bestia». Realmente no hay que confundir los términos: licántropo es aquel hombre que, debido a algún trastorno psicológico, cree haber asumido el aspecto, voz y comportamiento de un lobo, a pesar de que realmente no haya sufrido ninguna transformación física; lo cual lo lleva a actuar de acuerdo a ello, entiéndase matando y cometiendo actos de canibalismo. Por su parte, el hombre lobo es tradicionalmente un hombre que, por efectos de magia o por propensión natural, posee la habilidad de transformar su aspecto en el de un lobo. Todas las características típicas de aquel animal - como son la ferocidad, la fuerza, la astucia y la rapidez- son en ellos claramente manifiestas, para desgracia de todos aquellos que se cruzan en su camino. Puede permanecer con su aspecto animal únicamente por espacio de unas cuantas horas, o bien permanentemente.[cita requerida]

En el folclore y la mitología, un hombre lobo es una persona que se transforma en lobo, ya sea a propósito o involuntariamente, a causa de una maldición o de otro agente exterior. Un cronista medieval asoció la transformación con la aparición de la luna llena, pero este concepto fue raramente asociado con el hombre lobo hasta que la idea fue tomada por los escritores de ficción moderna. La mayoría de las referencias modernas están de acuerdo en que un hombre lobo puede ser asesinado si se le dispara una bala de plata, aunque esto es producto de la narrativa moderna y no aparece en las leyendas tradicionales. En versiones modernas, se agregó la idea que ha existido una fuerte rivalidad entre vampiros y hombres lobo, debido a que pertenecen a una misma raza de criaturas. Los licántropos, al haber renunciado a los poderes vampíricos para obtener una forma física superior, se ganaron el rencor de sus parientes.

Nadie sabe con exactitud cuándo se originaron las leyendas sobre hombres lobo. Puede que se trate de una superstición tan antigua como la humanidad misma, originada como explicación de diversas patologías. Así parecen indicarlo algunos casos datados.

El mito de los hombres lobo parece originario de Europa, y estaba muy vinculado con otras supersticiones y la magia negra. El mito es esencialmente masculino y, entre las causas de que un ser humano se convirtiera en hombre lobo, las más frecuentes eran las siguientes:

  • Ingerir ciertas plantas vinculadas tradicionalmente con los lobos y la magia negra.
  • Beber en el mismo lugar donde lo hubiera hecho un lobo.
  • Cubrirse con la piel de un lobo.
  • Dormir desnudo a la luz de la luna llena.
  • Usar una prenda hecha de piel de lobo.
  • Adquirir la capacidad de transformarse en lobo mediante magia y sortilegios.
  • Ser el séptimo hijo varón de una familia y no ser bautizado (ver Lobizón).
  • Ser mordido por otro Hombre Lobo. Esta última forma era la más común.
  • Tener relaciones sexuales con un hombre lobo.
  • Nacer después de mellizos o gemelos siendo hijo varón.

fAnTASmaS


Los fantasmas , en el folclore de muchas culturas, son supuestos espíritus o almas desencarnadas que se manifiestan (aunque no de forma sagrada) entre los vivos de forma perceptible (por ejemplo, tomando una apariencia visible, produciendo sonidos u olores o desplazando objetos), principalmente en lugares que frecuentaban en vida, o en asociación con sus personas cercanas. Constituye uno de los tipos más conocidos de superstición.

Descripción

Quienes dicen haberlos visto los describen como siluetas o sombras, por lo general oscuras o blanquecinas, más bien difuminadas o nebulosas, de carácter inmaterial y trasparentes a veces, que flotan y pueden no tener contorno definido a sus pies. Su aparición no suele sobrepasar el espacio de unos segundos, muy raramente un minuto, y cuando ocurre la temperatura baja sensiblemente, a veces junto a olores penetrantes, ruidos, golpes, música o voces. Su aparición provoca ulteriormente en los seres humanos de su entorno una cierta fatiga o depresión; poseen una carga electromagnética que puede ser medida.

Segun las leyendas , están ligados a un lugar, una leyenda o un mito; algunos, los llamados residuales, realizan siempre los mismos actos repetitivamente y su actitud no es comunicativa; otras veces sí es consciente, pero termina siendo esquiva y huidiza, hasta el punto de que podría decirse que parecen tener miedo o angustia ante los seres vivos; sólo unos pocos entre ellos son abiertamente hostiles o benéficos. Algunas veces han sido vistos y grabados traspasando muros sólidos; algunos pueden mover o transportar objetos de leve peso. Obedecen a las leyes de la perspectiva, según el punto del espacio desde el que se los contempla; muchos parecen sólidos y opacos, por lo que pueden ser filmados; se reflejan en los espejos y producen ruidos sincronizados con sus movimientos (pasos, etc). Generalmente dan la impresión de ser tan reales como las personas vivas, aunque sólo durante un período limitado.Ciertas personas, dicen observarlos con frecuencia o poder comunicarse con ellos; asimismo prácticas conocidas como necromancia o nigromancia aseguran poder hacer que los muertos se encarnen otra vez brevemente. Según qué tradición, los fantasmas aparecen con distinto atavío, más o menos relacionado con su muerte ; el momento difiere, aunque por lo común es a la puesta de sol, a medianoche, en luna llena, a una hora fija o en una fecha determinada, por lo general de noche; sin embargo hay también apariciones poco puntuales que "se manifiestan" de forma imprevista e imprevisible en cualquier momento, incluso a mediodía. Los parapsicólogos los clasifican en residuales y conscientes; los residuales repiten siempre lo mismo y parecen ajenos a quienes los ven; los conscientes poseen una actitud comunicativa y pueden interactuar con los vivos. Algunas ceremonias, como por ejemplo los exorcismos, tienen el poder de alejarlos durante un tiempo o definitivamente.

Los estudiosos del fenómeno afirman que existen también fantasmas de personas vivas y documentan también la aparición de fantasmas de animales , barcos, trenes, aviones, casas y pueblos fantasmas e incluso objetos fantasmas.

Pueden aparecerse solos, lo que es lo más corriente, o formando grupos, incluso numerosos. Su manifestación en algunos casos es anuncio o aviso de algo positivo o funesto por ocurrir. También los hay de carne y hueso: en 1937 Zora Neale Hurston escuchó en Haití el caso de Felicia Félix-Mentor, fallecida y enterrada en 1907 y viva aún treinta años después como zombi semiconsciente a causa del habitual uso en el animismo vudú de dosis semiletales de drogas/veneno como tetrodotoxina, estramonio o datura que provocan parálisis temporal y locura permanente. Otras alucinaciones visuales o auditivas provocadas por enfermedades o por las drogas, o bien las falsas resurrecciones espontáneas causadas por enfermedades como la rabia, la catalepsia etcétera pueden haber originado asimismo leyendasde aparecidos, revenants, vampiros y no muertos en personas predispuestas por prejuicios cognitivos y tradiciones culturales. Por otro lado, partes del cuerpo humano desaparecidas, amputadas o cercenadas pueden ser percibidas por el cerebro como miembros-fantasma. Un fantasma también podría ser un espíritu atrapado en nuestro mundo por media de invocaciones, brujería o un alma en pena.

ZOMbIs


Un zombi es, originalmente, una figura legendaria propia de las regiones donde se practica el culto vudú. Se trataría de un muerto resucitado por medios mágicos por un hechicero para convertirlo en su esclavo. Por extensión, ha pasado a la literatura fantástica como sinónimo de muerto viviente y al lenguaje común para designar en sentido figurado a quien hace las cosas mecánicamente como si estuviera privado de voluntad.
De acuerdo con la creencia, un hechicero vudú sería capaz mediante un ritual de resucitar a un muerto, que quedaría sin embargo sometido en adelante a la voluntad de la persona que le devuelve a la vida. Estos muertos vivientes son llamados zombis. La palabra podría tener relación con el nombre de una serpiente divina que es objeto de culto en las regiones de lenguas níger-congo (también adorada en el vudú bajo el nombre de Damballa).

Investigaciones

En 1937, Zora Neale Hurston conoció en Haití el caso de Felicia Félix-Mentor, fallecida y enterrada en 1907 y a quien, sin embargo, muchos lugareños aseguraban haber visto viva treinta años después convertida en zombi. Hurston se interesó por rumores que afirmaban que los zombis existían realmente aunque no eran muertos vivientes sino personas sometidas a drogas psicoactivas que les privaban de voluntad. Sin embargo, no pudo encontrar datos que fueran más allá del mero rumor.

Varias décadas más tarde, Wade Davis viajó a Haití para estudiar lo que pudiera haber de verdad en la leyenda de los zombis y llegó a la conclusión de que se podía convertir a alguien en zombi mediante el uso de dos sustancias en polvo. Con la primera, llamada coup de poudre , se induciría a la víctima a un estado de muerte aparente. Sus parientes y amigos la darían por muerta y la enterrarían, y poco después sería desenterrada y revivida por el hechicero. En ese momento entrarían en acción los segundos polvos, una sustancia psicoactiva capaz de anular la voluntad de la víctima.